Reyes dice trata de ayudar Licey en cualquier posición
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Por DiMaggio Abreu Peralta
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SANTO DOMINGO (Licey.com).- Pablo Reyes, el utility adquirido por los Tigres del Licey este año, prometió estar con el equipo desde el primer día de la temporada invernal 2018-2019, y ahí está, “tratando de ayudar en lo que podamos”, aunque solo tiene permiso por el primer mes.
El capitalino de 25 años, que probó las mieles de las Grandes Ligas al final de la temporada con los Piratas de Pittsburg (18 juegos), señaló que su organización le habló de participar el primer mes en la liga invernal dominicana, que no sabe lo que pasaría después y solo queda esperar.
Afirma que mantiene una rutina diaria antes de los partidos, de hacer cortes defensivos en los tres jardines, así como en el short-stop, la tercera o segunda bases, sin importar que ese día esté señalado para defender determinada posición, ya que entiende que eso le ayudará en su desempeño.
Aseguró que esa rutina la hace todos los días, inclusive, desde que se levanta en su casa, con el fin de mantenerse activo en “N posición”, razón por la cual tiene tres guantes, uno para jardineros, otro para la posición seis y otro de tercera base.
“Mentalmente siempre tengo que estar ‘ready’, no importa dónde vaya a jugar, porque quizás pase algo malo, por ejemplo, con un outfield, y me piden que cambie de posición”, dijo Pablo en la Antesala Azul a Tommy Troncoso, a quien le había dicho en septiembre en Estados Unidos que se uniría desde el principio de campaña a su nuevo equipo en la liga invernal.
En el aspecto ofensivo, dijo que no se propone batear para determinada banda del terreno, simplemente ver la pelota y hacerle swing y conectarla a donde salga.
El bateador derecho de 5’8” de estatura y 170 libras habló del momento del llamada a las Grandes Ligas desde la sucursal pirata en Indianápolis, Triple A, en la Liga Internacional.
Indicó que le avisaron del llamado alrededor de la 1:00 de la madrugada, que de inmediato llamó a su familia en Santo Domingo y que la “bulla” fue tan grande, “que creo que hasta los vecinos se levantaron”.
Su primer partido con los Bucaneros fue en bullicioso estadio de Chicago, que se sentía muy nervioso por la cantidad de público que apoya los Cubs, pero que después de fallar dos veces, con ponche incluido, conectó su primer imparable y de inmediato botó la presión.
Los 22 veces campeones nacionales y 10 de la Serie del Caribe adquirieron a Reyes y al jardinero Arístides Aquino de los Leones del Escogido, equipo al que cedieron al jugador del cuadro Miguel Gómez y al receptor Tony Cruz.
En 18 partidos que disputó con los Piratas en el mejor béisbol, bateó para .293, por ligar 17 hits en 58 chances, fletó tres jonrones, dos dobles, impulsó siete carreras, anotó nueve, caminó cinco veces por bolas, porcentaje de embasarse (OBP) de .349, recibió 11 ponches.
Antes de ser subido en septiembre, Reyes actuó en 122 partidos entre Triple A (110) y Doble A (12). Acumuló promedio en bateo de .284, por fletar 114 imparables en 401 turnos, recibió 32 bases por bolas, porcentaje de embasarse (OPS) de .337. Entre sus batazos logró ocho cuadrangulares, 23 dobles y cuatro triples. Anotó 55 carreras, impulsó 4, con 16 bases robadas.