JUBEY, Boca Chica (Licey.com).- Tras 21 años de experiencia en el mundo del béisbol, el receptor Miguel Olivo llega a las filas de los Tigres del Licey con la mente puesta en ayudar a la causa de los campeones y con la palabra retiro fuera de su sistema.
“Me siento mucho mejor que cuando tenía 20 años. Me siento como un niño cuando bateo, tiro o corro. No tengo en mente retirarme y seguiré jugando mientras Dios me mantenga en salud y con buen físico”, dijo Olivo al ser entrevistado para LiceyTV por Sussy Jiménez.
Olivo fue adquirido durante la temporada de receso desde los Leones del Escogido en un cambio por los servicios del también receptor Ronny Paulino.
“Cuando llegas al Licey te das cuenta de que es otro nivel. El cambio me sorprendió un poco, pero le doy gracias a Dios, he tenido un gran recibimiento por parte de todos. Mi familia ha sido parte del Licey durante muchos años”, agregó el veterano catcher.
Es un receptor de 13 temporadas de experiencia en las Grandes Ligas con los Medias Blancas de Chicago, Marineros de Seattle, Padres de San Diego, Marlins de Florida, Reales de Kansas City, Rockies de Colorado y Dodgers de Los Angeles.
Añadió que la preparación para defender la posición de receptor requiere de un gran deseo y de una disciplina diferente a la de cualquier otra en el deporte del béisbol.
En la pelota otoño-invernal dominicana ha participado también con los Toros del Este y las Águilas Cibaeñas.
“Luego de 21 años como profesional, el juego te llega de forma natural. Ya cuando hay presión es que te sientes bien y puedes manejar todas las cosas que lleguen sean buenas, medianas o malas”, dice Olivo.
Por Alex Rodríguez
