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La racha en la que se encuentra Elly De La Cruz comienza a sentirse como un cuento fantástico que podrías escuchar de tus abuelos, difícil de creer y muy probablemente embellecido.
Pero lo único alto de esta historia es la altura de EDLC: 6 pies y 5 pulgadas.
El prospecto número 4 en béisbol según MLB Pipeline ha estado en una racha en el mes de mayo. El martes por la noche agregó otra hazaña a su deslumbrante currículum: un batazo que pareció llegar a la luna en la victoria de Louisville en Triple A 5-4 sobre Worcester.
El campocorto de 21 años se acercó al plato en la parte baja de la novena en el Louisville Slugger Field con un corredor en primera y Kaleb Ort en el montículo. El derecho no había permitido ninguna carrera en siete apariciones para la filial Triple-A de los Medias Rojas esta temporada, pero eso cambió rápidamente. Después de llevar la cuenta a 3-2, De La Cruz lanzó una bola rápida sobre la pared del jardín derecho-central para enviar felices a los fanáticos de los Bats a casa.
El jonrón recorrió 432 pies y dejó el bate de De La Cruz a 109.2 millas por hora ¿y sabes qué es una locura? Esa no es una velocidad de salida particularmente alta para el prospecto de los Rojos mejor clasificado. El nativo de República Dominicana registró 118.8 millas por hora desde el principio esta temporada, la pelota más dura registrada en Triple-A, y tiene otros cuatro hits entre los 10 primeros.
Además de conectar el gigantesco jonrón, De La Cruz mostró algunas otras señales alentadoras el martes. Se fue de 3-1 pero caminó dos veces y solo se ponchó una vez. Vio un promedio de poco más de cinco lanzamientos por turno al bate, evidencia de que su enfoque en las buenas decisiones de swing ha comenzado a dar sus frutos.
De La Cruz tiene una proporción de ponches a bases por bolas de 25/20 en mayo, superando su proporción de 18/2 en nueve juegos en abril.
La destacada actuación extendió la racha de hits de De La Cruz a 10 juegos y está luciendo una línea de bateo de .304/.401/.659 esta temporada, dando a los fanáticos más razones para creer que su debut en las Grandes Ligas está en el horizonte.