Por Andrés Noé Gómez
El Tiempo
BARRANQUILLA, Colombia,-Los Tigres del Licey no dejaron duda de que son los más grandes del Caribe, en su paso de dos juegos por Barranquilla, jugando ante los Caimanes, al llevarse la serie internacional con dos triunfos en igual número de juegos, en la oportunidad final con una victoria por blanqueada 5-0 sobre los ‘saurios’.
No hay duda, los Tigres del Licey, con 111 años de existencia, 22 títulos profesionales de su país y 10 de la Serie del Caribe, son una novena de respeto a donde quiera que van. En su andadura por la ‘Arenosa’ no tuvieron problemas en exhibir su indiscutible poderío en el estadio Édgar Rentería, ante la afición ‘currambera’.
La novena dominicana se despachó con una ofensiva de nueve imparables, demostrando nuevamente su poder. De otro lado, Caimanes apenas y logra anotarse un hit en las nueve entradas del partido. En cambio, los bateadores de Licey, con mucha libertad para hacer su trabajo, se poncharon en trece oportunidades, por ocho de los barranquilleros.
Las primeras rayitas del juego llegó fueron en la parte alta del segundo episodio, cuando el lanzador cartagenero Luis Escobar tuvo problemas para controlar el tremendo potencial ofensivo de los liceystas, que al ver el mínimo atisbo de duda, sacan a relucir su contundente bate.
Caimanes estuvo completamente maniatado en la ofensiva. Foto: Jairo Cassiani.
Fue así que Aristides Aquino, embasado por tiquete gratis, quien luego llegó a segunda mercer de un wildpitch de Escobar, fue llevado al plato gracias a un sencillo impulsador de Manuel Geraldo para el 1-0.
La segunda llegaría en las piernas del mismo Geraldo, tras un nuevo lanzamiento descontrolado de Escobar y un batazo impulsador de Elián Herrera al bosque derecho del Édgar Rentería.
Entre tanto, los Caimanes volvieron a demostrar la falta de poder ofensivo del primer juego, solo logrando un imparable en el cuarto acto, por intermedio de Dilson Herrera. De allí en más, solo pudieron visitar la primera almohadilla, gracias a dos bases por bolas concedidas por el trabajo de los relevistas del Licey.
Los dominicanos volvieron a anotar por intermedio de Anderson Hernández en la sexta entrada, luego de un cañonazo al fondo del jardín central de José Medina, ante el servicio monticular de Randy Cuentas. Medina luego marcaría la cuarta carrera gracias a un doble de Aquino que bañó al patrullero Carlos Vidal.
La puntilla llegaría en la quinta entrada, cuando el recién ingresado Jhon Romero enfrentó desde la lomita a Medina, quien sin ningún inconveniente, chocó un contundente batazo al bosque derecho, por donde la pelota desapareció en el en las gradas con un enorme cuadrangular para el 5-0.
Jugada cerrada en el plato, durante el segundo juego de la serie. Foto: Jairo Cassiani.
En la novena entrada, se presentó el momento dramático del partido cuando el cerrador Horacio Acosta, en un intento de llegar a pisar primera, se lesionó y debió salir del diamante. Sin embargo, Caimanes no tenía más lanzadores en el reverbero por lo cual debió venir desde la cueva Yeizer Marrugo, quien lanzó el juego del viernes, para terminar el partido.
La victoria se la acreditó Leuris Gómez en dos entradas, en las cuales otorgó una base por bolas, no permitió ni imparables ni anotaciones y ponchó a un bateador. De otro lado, la derrota fue para Luis Escobar en una entrada y un tercio, en las cuales le fabricaron dos carreras, le dieron dos indiscutibles, ponchó a uno y dio tres bases por bolas.
Esta serie deja un diagnóstico del nivel real de la pelota colombiana a nivel de equipos profesionales, y lo que será el reto de cara a las aspiraciones nacionales de poder participar en un corto plazo en la Serie del Caribe. Ahora la bola está en mano de la directiva y entrenadores. Veremos si tiran los strikes.