Esta Esquinita se honra y complace en transmitirle a Mendy López la más profunda y sincera felicitación por haberse convertido en el máximo jonronero de por vida del beisbol profesional dominicano, hito alcanzado el miércoles 16 de noviembre 2011 en su propio parque, el Estadio Cibao, frente a sus familiares, sus amigos cercanos y frente a los miles de fanáticos que lo han seguido toda la vida. Justo regalo de Dios para Mendy.
Oportuno es destacar que muchos de los jonrones de Mendy hijo fueron narrados por Mendy López padre, como parte de su larga vida como narrador de las Aguilas Cibaeñas.
Mendy conectó su cuadrangular 61 en su temporada número 14 y sin haber ganado nunca un liderato de jonrones en la liga. A juicio nuestro, este detalle más que disminuir la hazaña de Mendy, la engrandece más pues es un fuerte reflejo de consistencia. No se trató, pues, de una buena racha durante dos o tres temporadas.
Aprovechamos para destacar que los records de por vida son cada vez más difíciles de romper, debido al giro que ha dado el beisbol de invierno como consecuencia de los altos salarios en dólares devengados por los jugadores desde la primavera hasta el final del otoño, y al desafortunado y perjudicial control de las organizaciones de grandes ligas sobre el destino y el derecho de los jugadores criollos de jugar beisbol en su país de origen.
Veamos estas muestras y reflexiones sobre las probabilidades de que los siguientes records de nuestra liga sean superados alguna vez:
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-Los 70 juegos completos de Guayubìn Olivo (Abriò 107 y completò 70. Increìble, no?)
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-Las 395 bases robadas por Miguel Dilonè
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-Las 1,335.2 entradas lanzadas por Federico-Chichì-Olivo
Lo curioso es que para poder perseguir cualquier record de por vida en nuestro beisbol hay que participar en muchos juegos cada año durante muchos años y a la vez ser muy bueno pero no tan bueno como para que "sus dueños del norte" le impidan jugar aquí.
Volviendo a Mendy y su hazaña, si bien el locutor de la bocina interna del Estadio Quisqueya no destacó el jonrón 60 de Mendy aquella tarde de domingo en que empató en el primer puesto con Félix José, de seguro porque ni el Licey ni la Liga Dominicana se prepararon para ello, ésta vez el locutor de bocina del juego Estrellas-Licey anunció la rotura del record en Santiago y transmitió a Mendy López las felicitaciones de la Directiva del Licey, gesto que movió a fanáticos de todos los colores a manifestarse con aplausos, aplausos que reflejan amor por el beisbol sin distinción de colores.
Aprovechamos para acoger como invitada la columna Grand Slam de Yancen Pujols publicada en El Caribe del miércoles 9 de noviembre 2011
Grand Slam
Yancen Pujols, El Caribe/CDN, 9 de noviembre del 2011
Pensar para la historia
Si no se ha pensado aun, es más que propicio el momento para que en nuestro espectáculo rey se adopten medidas acorde con los nuevos tiempos.
Entiendo que avanzamos en algunos aspectos, y aprovecho la ocasión para saludar esos pasos que se han dado en términos promocionales, mejor oferta del espectáculo y ambiente festivo.
Aun así, la Liga Dominicana de Béisbol debe tomar más control de esos instantes en los que está de por medio el valioso aporte a la historia de nuestro béisbol.
Mendy López se inscribió el pasado domingo en las páginas doradas de la pelota local. En un estadio Quisqueya repleto de parroquianos por el choque contra los Tigres del Licey, el afable jugador de las Aguilas Cibaeñas se convirtió en apenas el segundo mortal con 60 vuelacercas en los anales invernales.
La pelota con la que logró ese histórico cuadrangular no estaba marcada, situación que se corrigió para el encuentro de anoche, pero la ocasión era ideal para que el organismo rector tuviese todos esos detalles en un estuche tan excelso como el momento mismo que se vivivía en el vetusto parque.
No es solo en esta hazaña que el partido debe detenerse, sino en todas las que vengan, porque el deporte se nutre de sus logros actuales y de las leyendas que le han dado realce y vida.
El protagonista de cualquier hito debe ser propiedad de la liga y de nadie más. Hay que hacerle su reconocimiento, no importa en el terreno que se produzca y hay que organizar una conferencia de prensa inmediatamente salga de juego el pelotero de marras o al final del encuentro, si es que se requiere que se mantenga en acción por la importancia del mismo.
Mientras más organizado el acto mejor. Se aprecia que se esperaba el momento para que todos los actores del espectáculo, fanáticos, jugadores, ejecutivos y prensa, puedan contemplarlo y a la vez poner su granito de arena.
Al nivel supremo, llámese las Grandes Ligas, se hace eso y más. Cuando la historia llama, se acude con el mayor respeto y las rivalidades se dejan en el banco.
A fin de cuentas, es pelota invernal DOMINICANA.