Impacto y proyección de LIDOM en los peloteros

SANTO DOMINGO (Licey.com).- Las ligas de béisbol otoño-invernal no dejan de ser beneficiosas tanto para los jugadores nativos como para los extranjeros.

En el caso más reciente está el jardinero de los Padres de San Diego, Jurickson Profar, quien hará su debut en el Partido de las Estrellas de las Grandes Ligas.

Profar, un veterano de 11 campañas en las Ligas Mayores, se convertirá en el cuarto jugador con mayor experiencia en tener su primera convocatoria al encuentro de los estelares. Tuvo una buena participación en la Liga Dominicana de Béisbol en la estación 2023-24.

También existen las historias actuales de jugadores con un alto nivel de éxito en distintas ligas del mundo como Domingo Santana y Albert Abreu en Japón, Mel Rojas Jr. y Brooks Hall en la KBO y la Chinese Professional Baseball League, respectivamente y ni hablar del éxito reciente obtenido por Ramón Hernández, César Valdez, Dawel Lugo y muchos otros jugadores que accionan en la Liga Mexicana de Verano.

En adición a esto, son incontables los peloteros que, luego de una experiencia en el béisbol invernal del caribe, han afinado sus habilidades y enfilado sus carreras en la MLB tanto para su beneficio personal como para el de sus organizaciones.

Históricamente, una alta cantidad de peloteros han afinado sus herramientas luego de participar en la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana. Tales son los casos de los receptores Welington Castillo, Carlos Ruiz y Roberto Pérez, además de los inicialistas Carlos Peña, Mark McGwire y Randall Simon.

Los infielders Luis Castillo, Ronnie Belliard, Gio Urshela, Donovan Solano y Triston Casas y los jardineros José Bautista, Emilio Bonifacio, entre otros. Además, desde los lanzadores Ubaldo Jiménez y Manny Aybar, hasta Carlos Mármol, Ramón Ortiz y César Valdez.

En muchos casos, los jugadores han recibido elementos que han aportado a su crecimiento tras jugar en la pelota otoño-invernal y han elevado su juego en las Ligas Mayores. El calor aportado por los fieles fanáticos a la atmósfera en los estadios, el espíritu de competencia, el nivel técnico, así como la altura de los rivales que enfrenta y el ajuste mental que tienen que hacer en el béisbol del caribe, preparan a los prospectos para la exigencia del Big Show.

En años recientes, casos como los de Elly De La Cruz y Oneil Cruz han ejemplificado como los jóvenes peloteros pueden usar su presentación en la pelota otoño-invernal como antesala perfecta para su establecimiento definitivo como regulares en las Grandes Ligas.

Déjanos tu comentario