SANTO DOMINGO (Licey.com).-Como un jugador y entrenador de tenis y comentarista de baloncesto, tal vez lo más lejos que tenía pensado Fernando Ravelo es que sería uno de los más exitosos gerentes generales en la historia del béisbol dominicano.
Pero con uno de los apellidos que saben a Tigres del Licey y como arquitecto de algunos de los más recordados equipos campeones, su labor no es segunda de nadie en la Liga Dominicana.
«Lo más difícil es ganar un campeonato, hay que juntar muchas cosas», dijo Ravelo tras comparecer como invitado al podcast «Al Ritmo del Tigre» donde respondió preguntas de Oscar Pérez y Fernando Pascual.
Puso como ejemplo el pasado título ganador por el glorioso (2023-24) el cual fue logrado a pesar de perder a sus tres principales bateadores.
«Este tuvo más mérito que el anterior (2022-23) ya que en ese se podría decir que el equipo salía como favorito», agregó el también comentarista de la cadena de televisión del equipo azul.
Y a pesar de no haber estado en el terreno de juego, desde el 2001 cuando tomó la posición de gerente general se preocupó y se preparó para ser un facilitador de las inquietudes de los jugadores.
Una de las características que resaltó de los jugadores que tuvo durante su tiempo en el puesto fue la unidad.
«Tuve la oportunidad de contar como capitanes como Ronnie Belliard y Emilio Bonifacio. Lo que ellos hicieron y hacen no tiene precio ya que, además de ser peloteros son liceistas», añadió.
Dijo que una de las partes más difíciles en la labor de gerente general es cuando toca discutir los salarios de los jugadores, «poner el precio a su trabajo sabiendo que hay unos límites».
Compartió varias anécdotas con relación, por ejemplo, al «Tulilazo» (2002) o el nacimiento de «Los Menores» (2006).
Además de esos títulos, también gerenció al equipo en las versiones ganadoras correspondientes a los torneos de 2003-2004 y 2008-2009 y las series del caribe de 2004 y 2008.