Por DiMaggio Abreu
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SANTO DOMINGO (Licey.com).- Imagine con sus tamaños de hombres grandes al manager Pat Kelly y al capitán azul Emilio Bonifacio bailando con pequeñas parejas de entre cuatro y nueve años de edad al ritmo de una contagiosa música navideña infantil.
Y a la mascota “El Tiguerito” divirtiendo con sus peripecias a niños y niñas, mientras la madrina Isabelle Marie Ravelo Nadal reparte regalos y despierta sorpresas y alegrías de infantes hasta entonces quejumbrosos o silenciados por las dolencias.
Son acciones balsámicas que forman parte de una tradición que ha forjado la directiva del glorioso Club Atlético Licey, en estos momentos presidido por el licenciado Miguel Ángel Fernández, de apoyar a sectores vulnerables de la sociedad, transportándoles alegrías a través de su programa “Licey con la Comunidad”.
Los favorecidos este jueves 29 de diciembre fueron más de 60 niños y adolescentes con enfermedades reumáticas del hospital infantil Robert Reid Cabral, en el Distrito Nacional, que recibieron por adelantado los regalos por el “Día de los Reyes Magos” de manos de personal del glorioso conjunto Tigres del Licey, que se transportaron allí, junto a la directora de Relaciones Públicas Elvira Trinidad.
“Muchas gracias a los Tigres del Licey por habernos apoyado en esta actividad para los niños con enfermedades reumáticas; gracias por traerles alegrías en estas navidades y en este Día de Reyes”, expresó la joven Anny Marisel Amparo Díaz, quien fue la coordinadora de la actividad, por parte de la Asociación de familiares de los afectados que reciben atenciones en este hospital.
La madrina Isabelle Marie, asidua a estas actividades tal como lo prometió al asumir su reinado de esta temporada 2016-17, dijo sentirse “muy feliz por poder traer un poquito de alegría a estos niños”.
“Me siento muy agradecido con Dios por darme la oportunidad de poder aportar un poco; gracias a los Tigres del Licey por respaldar una causa así y que Dios lo siga bendiciendo”, expresó el capitán Bonifacio, quien junto al grupo entregó regalos, ayudó a realizar concursos y hasta bailó para dar mayor colorido al encuentro y que disfrutaron los niños.
“Es una muy grata experiencia poder venir a este hospital a brindar alegría a estos niños y gracias a Dios que el Licey puede hacer esto”, expuso el dirigente Patt Kelly, quien no es la primera vez que acude a brindar sus servicios en una causa similar, de las que acostumbra realizar “Licey con la comunidad”.
