Por DiMaggio abreu Peralta
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SANTO DOMINGO (Licey.com).- Lo de Sergio Alcántara ha sido todo sorprendente este invierno. Desde su escogencia por el Licey en su segundo turno del sorteo de Novatos, pasando porque hizo el roster en la primera semana, hasta mantenerse como elemento necesario en el cuadro interior, a falta de menos de diez juegos de la serie regular 2016-17.
Aunque el capitalino de 20 años afirma no haberse sorprendido de su tempranera escogencia –ya se lo habían avisado-, confiesa que no se esperó que se iba mantener a estas alturas con el equipo, pero está muy feliz de lograrlo.
Recién, el domingo 11 de diciembre, el gerente general Junior Noboa concedió otro punto inesperado, al expresar su creencia de que “debe ser el Jugador Más Valioso” para los Tigres este año.
Noboa, quien dejó absortos a muchos entendidos al seleccionarlo como su segundo en el draft del 15 de septiembre, cuando había muchos talentos entre los 138 novatos que restaban, asegura que no se esperó lo que el sobrino de Anderson Hernández ha hecho para el equipo en la defensa del campo corto y con su tanta frecuencia en las bases.
“Él ha sido un factor tremendo para nosotros. Estoy totalmente sorprendido con la madurez y con el fundamento con que este muchacho está jugando al béisbol de invierno”, afirmó del torpedero que él mismo firmó para la organización Arizona Diamondbacks y que este 2016 se saltó desde una liga de novatos hasta Clase A avanzada, pasando por A corta y la Clase A Media.
Citó que lo tomó en el sorteo como número dos, porque lo conoce desde que lo firmó a sus 16 años y lo ha visto en los distintos niveles, sabe que es buen defensor y que podía ayudar al equipo en el futuro “o en un caso de emergencia”, pero nunca de la forma que lo ha hecho.
“Hoy está haciendo un trabajo, que yo me atrevería a decir, que debe de ser el jugador más valioso para nosotros”, apuntó el gerente general de los Tigres y vicepresidente para América Latina de los Diamondbacks.
Alcántara emergió a la defensa electrizante del campo corto del conjunto azul, primero, cuando Willy Adames se lastimó; luego por las ausencias de Adalberto Mondesí y ha compartido las paradas cortas con Marco Hernández, quien también ha defendido la antesala y la segunda base, con Anderson.
Cuando el equipo se tornó lento, aportó su velocidad como abridor en la alineación. Entre hits conectados y bases por bolas, se hizo un asiduo en la circulación, a tal punto, que un comentarista de un programa radial atinó a decir, que Alcántara “vive en la primera base”.
En 25 partidos, su promedio de bateo al miércoles 14 de diciembre estaba en .256 (78-20), y con 14 bases por bolas recibidas, su porcentaje de embasarse es .370, con 12 carreras anotadas y cinco impulsadas.
Muchos lo han calificado como “el último menor”, porque su desempeño recuerda al tormentoso dueto que en su momento formaron Anderson Hernández y Erick Aybar. Así de sorprendente ha sido Sergio Alcántara para el Licey.