SANTO DOMINGO (Licey.com).- Marco Hernández se convirtió en el jugador dominicano número 146 del Licey que debuta en las Grandes Ligas, cuando en el legendario Fenway Park se fue de 4-1, con anotada y base robada.
“En Pawtucket, me dieron el día libre y después del juego me dijeron que me habían subido, me sorprendí, porque era muy temprano en la temporada” dijo Marco al ser entrevistado por Junior Pepén, de la cadena en español de los Medias Rojas de Boston.
Fue una tarde de domingo en que el derecho Aaron Sánchez, de los Blue Jays, lanzó una gema de pitcheo en triunfo de 5-3 ante los Red Sox. Permitió una carrera, dos hits y cuatro bases por bolas.
Hernández tuvo uno de esos hits, una de esas bases por bolas y anotó la única carrera que permitió Sánchez.
En su primera aparición, Hernández recibió un pasaporte con seis lanzamientos. En su siguiente turno le dio hit, su primero de su carrera.
Sánchez en 4 2/3 entradas, aquietó los bates de los Medias Rojas, cuando Marco llegó al plato con dos outs en la quinta entrada, por lo que el dominicano solo se limitó a hacer contacto.
Le sacó foul al primer lanzamiento que vio y luego sacó una línea por encima de la cabeza del torpedero Troy Tulowitzki dirigiéndose a los predios del jardinero izquierdo Michael Saunders, rompiendo su bate en el proceso.
«Vino con un sinker, pero yo solo estaba buscando hacer contacto y poner la pelota en juego” dijo Marco Hernández al ser entrevistado por la periodista Jen McCaffrey del portal masslive.com después del juego juego.
Hernández, de 23 años, se convirtió en el primer jugador del Licey en debutar este año desde Nomar Mazara, de los Rangers de Texas lo hiciera el 10 de abril ante los Angels en Los Ángeles además de ser el quinto Red Sox dominicano en llegar a las mayores.
Julio Valdez, en 1980; Israel Alcántara, en el 2000; Manny del Carmen y Hanley Ramírez en 2005, fueron los anteriores del Licey en llegar al mundo de las Grandes Ligas como patirojos.
El mocano Hernández es el tercer dominicano que debuta este año, Nomar Mazara, de Texas y Luis Perdomo, de San Diego, fueron los anteriores.
Por Alexander Gómez
