Fueron cuatro megaestrellas contemporáneas. En una época difícil, de grandes cuestionamientos para excelsas figuras que brillaron en el juego y que hasta ahora en sus narices les han cerrado las puertas del sagrado santuario, sito en la Villa de Cooperstown, Craig Biggio, John Smoltz, Randy Johnson y Pedro Martínez recibieron el bautizo que les confirma como inmortales del béisbol.
La calurosa tarde veraniega vio desfilar, ante riguroso pase de lista, a conspicuas personalidades que en su tránsito por las Grandes Ligas elevaron el béisbol a otro nivel. Ahora ellos recibían a cuatro colegas de altos méritos y limpia trayectoria.
La generación actual sí que conoció el juego aguerrido de Biggio, brillante en la receptoría, la intermedia y el bosque central, capaz de sacrificar su anatomía en busca de una base que le permitiera anotar una de las más de 1,800 carreras que consiguió en su recorrido por diferentes estadios.
Smoltz supo salir adelante después de una “Tommy John”. En un staff de colegas que alcanzaron cada uno 300 victorias (Greg Maddux y Tom Glavine) y sumaron seis Cy Young, el calvo se distinguía por su amplio repertorio, consiguió su lauro en 1996, fue grande como abridor, inmenso como cerrador y se graduó summa cum laude en la postemporada.
Big Unit fue intimidante, dominante, brutal en los grandes momentos con una acumulación numérica que, como el bronce, sobrevivirá al paso del tiempo.
Llegó el turno de El Grande, con un pie menos de estatura que el hombre que le antecedió en el discurso y a quien sacó una risa que la mayoría desconocíamos en el antiguo astro del pitcheo al señalarlo como su hermano, hijo de otra madre.
Martínez habló de su trayectoria, saludó la inmensa cantidad de seguidores y compatriotas que viajaron desde su país y desde diferentes zonas de Estados Unidos para respaldarle en tan solemne ocasión.
Sin un lenguaje rebuscado, Pedro supo poner cada palabra, en inglés o español, en su justo lugar, agradecer a todos los que tuvieron que ver con su crecimiento como jugador y ciudadano y sobre todo hacer sentir orgullosos a los habitantes de su insular territorio de 48 mil kilómetros cuadrados que día tras día luchan por un futuro mejor.
Oh, Pedro, El Grande.
DATOS
Ante la televisión nacional cuando en su país se celebraba el Día de los Padres y al culminar los festejos de la exaltación de su amigo-hermano Pedro Martínez, David Ortiz enseñó que todavía le queda gasolina en el tanque.
Big Papi colocó dos pelotas tras la verja (48 juegos multjoneros) en una bestial actuación de cuatro hits y siete empujadas, su cifra tope, luciendo como en la Serie Mundial del 2013, en la paliza de Boston sobre Detroit 11-1. En la jornada nocturna el artillero de los Medias Rojas llegó a 1,587 impulsadas en su carrera y dejó atrás a Al Kaline (1,580), quien estuvo en Cooperstown ayer, mi ídolo ya fallecido Harmon Killebrew (Killer) y Rogers Hornsby, ambos con 1,584.
“Pedro, se me salieron las lágrimas cuando escuché a Pedro hablar porque conozco al hombre”, dijo David sobre el discurso de su compatriota ayer en la ceremonia del Salón de la Fama…Mike Trout montó un espectáculo anoche en Anaheim al irse profundo dos veces y batear de 4-4 con tres anotadas y cinco llevados al plato.
Trout enseña una monstruosa línea ofensiva de .315-.405-.632 con WAR de 6.8, líder en anotadas (75) y jonrones (31). Con ese tipo lo que hay que buscar es quien es el segundo mejor pelotero de las Grandes Ligas, pues él se ha distanciado mucho del resto de sus colegas y tiene en el bolsillo su segundo JMV…Juan Uribe decidió el triunfo de los Mets 3-2 sobre los Dodgers con batazo a la pared en el décimo episodio.
Crecerse es la especialidad del nativo de Palenque, San Cristóbal…La racha de Zack Greinke finalizó en 45.2 entradas sin permitir anotación, una gran proeza…Jeurys Familia ha fallado dos chances de salvar en sus últimas cuatro presentaciones, eso coincide con el regreso al equipo de Jenrry Mejía, quien no ha permitido carreras en sus siete participaciones…Los Indios sufrieron su sexto revés al hilo al ser barridos por los Medias Blancas.
El conjunto tiene 19-30 en la casa, 45-52 en general, y con muy poco chance de obtener un puesto para la postemporada del 2015…Albert Pujols alcanzó 100 estafas en su carrera y se unió a una especial compañía con Hank Aaron, Willie Mays y Babe Ruth de jugadores con por lo menos 100 robos, 500 jonrones y promedio de por vida sobre .300. Los dos primeros agregan 3,000 hits, una cifra que el dominicano debe alcanzar en un par de años. Que grande ha sido Pujols.
HRS DOMINICANOS
Nelson Cruz (25-222), David Ortiz disparó dos (19-485), Maikel Franco (11-11).
Por Rolando Guante
El Nacional